El tema del dar es sumamente importante para todo cristiano, y especialmente cuando, con toda sinceridad, se busca adorar, agradar y servir a Dios a través de nuestros bienes.
He sido motivado a presentar este breve estudio, a causa de que veo que existe mucha información al respecto, que no está fundamentada en la Palabra de Dios, y en muchos casos, hasta la Biblia se maneja de mala manera para sostener alguna idea que no está fundamentada en la Verdad.
También creo que muchos cristianos están siendo apartados de grandes bendiciones, por estar practicando un sistema que no es el que nos dejó el Señor a través de la inspiración de su palabra escrita. Por esto creo firmemente que cada creyente debe volver a la Biblia, para conocer bien lo que Dios espera de nosotros como mayordomos suyos y como hijos suyos.
Espero que estas enseñanzas sean de gran edificación para su vida. Dios le bendiga.
EL PRINCIPIO DEL DAR A LA LUZ DE LA BIBLIA
Dispensación Patriarcal.
A través del estudio de la Palabra de Dios encontramos varios principios que rigen la vida del hombre de Dios. El amor, el perdón, la fe y la adoración son principios que se encuentran en toda la Biblia, independientemente del lugar en donde los busquemos.
Uno de los principios que muchos han pasado por alto, e incluso, lo han cambiado, es el dar. Este principio ha sido cambiado por lo que muchos llaman "el principio del diezmo"; sin embargo, cuando analizamos detenidamente y sin prejuicios lo que la Biblia dice, vemos que el principio es el dar y no una cantidad específica de la acción.
Cuando una persona diezma esta dando a Dios de sus bienes. Vemos cómo el dar está presente sin importar la especie, la cantidad y la regularidad de lo que se presenta a Dios. Vamos a ver los pasajes bíblicos de cada una de las tres dispensaciones mostradas en la Biblia con el fin de que captemos este principio.
"..Y aconteció andando el tiempo, que Caín trajo del fruto de la tierra una ofrenda a Jehová. Y Abel trajo de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas.."
(Génesis 4:3, 4).
Aquí tenemos la primera mención acerca del dar. Vemos cómo nació en el hombre la decisión de traer a Dios una "..ofrenda..". No hay indicación en el texto de que ellos fueron obligados o forzados a presentar "..una ofrenda a Jehová.."; lo que indica que la misma fue una decisión voluntaria. Es verdad que algo se les tuvo que haber enseñado con respecto a lo sucedido. Sin embargo, no cabe duda, su ofrenda es voluntaria.
Ahora, sin entrar en el detalle de la especie y la cantidad ofrendada, vemos cómo el principio del dar empieza en el libro de Génesis.
"..Y edificó Noé un altar a Jehová, tomo de todo animal limpio y de toda ave limpia, y ofreció holocausto en el altar. Y percibió Jehová olor grato.."
(Génesis 8:20, 21).
En este texto, la palabra "..ofreció.." implica el principio del dar. No se habla de cantidades, sí de especie, pero lo importante en esto es que el dar sigue presente en este suceso.
Aunque no es el punto en este momento, sí es importante que vaya notando que, antes de la ley, el diezmo no era una práctica común, no debemos pensar que en la era patriarcal se daba un diezmo cada domingo, ni en los tiempos de la ley se practicaba un diezmo semanal. Vaya notando por favor estos datos tan interesantes.
"..Y le dio Abram los diezmos de todo.."
(Génesis 14:20).
Este caso es muy interesante. Primero vemos que en él, una vez más, el principio del dar está claramente presentado. Ya a estas alturas del Génesis se va mostrando algo que es necesario notar, que la cantidad, la regularidad y la especie cambian, pero el principio permanece. Esto lo veremos más concretamente en una gráfica al final.
"..de todo lo que me diereis, el diezmo apartaré.."
(Génesis 28:22)
En este pacto que hace Jacob con Dios, también el principio del dar está presente. Si Dios le bendecía con lo que Jacob estaba pidiendo (vv. 20, 21), él le iba a dar el diez por ciento de lo que recibiera.
Hasta aquí la Palabra de Dios indica que el dar era practicado por los Patriarcas, estableciendo así esto como principio.
Dispensación Mosaica.
Bajo la ley también se hace evidente el principio del dar. Es verdad que ya bajo la ley era una obligación traer a Dios los diezmos y las ofrendas, pero esto no cambia el principio del dar.
"..Indefectiblemente diezmarás.."
(Deuteronomio 14:22)
En este pasaje la palabra "..diezmarás.." lleva en sí la idea de dar. Ellos tenían que dar el diezmo, no era una opción, tenían que dar el diezmo a causa de la ley. Lo interesante de todo es que, según lo que hemos visto, el dar está presente tanto en la era patriarcal como en la mosaica.
Dispensación Cristiana.
Bajo la dispensación Cristiana también se hace evidente el principio del dar. Ya no se presentaban ofrendas obligatorias sino voluntarias.
Los primeros cristianos dieron para suplir las necesidades de los pobres (Hechos 2:44, 45). José, luego llamado Bernabé, también dio con el mismo fin (4:37). Al parecer, la Iglesia siguió esta practica por el hecho de que es parte de la doctrina de los apóstoles.
"..Cada uno dé como propuso en su corazón.."
(1 Corintios 16:2)
En la siguiente gráfica notaremos como el dar está presenta en cada una de las tres dispensaciones bíblicas, quedando así el dar como principio.
EL DAR PRESENTADO EN LAS TRES ERAS
(¿NO ES UN PRINCIPIO?)
DISPENSACIÓN
PATRIARCAL
DISPENSACIÓN
MOSAICA
DISPENSACIÓN
CRISTIANA
Dieron
Dieron
Damos
Trajeron una ofrenda...
Diezmarás...
Cada uno dé...
(Génesis 4:3, 4)
(Dt. 14:22)
(2 Corintios 9:7)
Como vemos, el dar está claramente establecido como principio en toda la Biblia, independientemente de la dispensación donde se le busque. También así entendemos que ni el diezmo, o la ofrenda, son un principio, sino "el dar".
EL DIEZMO NO ES UN PRINCIPIO
Todo lo que hemos visto en la Palabra de Dios anteriormente, establece la verdad de que el diezmo no es un principio. En Génesis vemos que sólo se "daba" a Dios lo que la persona quería, y a esto, no le llamaban diezmo sino "ofrenda" (Génesis 4:3, 4).
¿Cuál es la argumentación para decir que el diezmo es un principio, y que este debe ser observado en las iglesias? Se dice que el diezmo es mucho más antiguo que la ley; por tanto, esto lo hace un principio. Es verdad que el diezmo fue practicado antes de la ley, y bíblicamente hablando, el primero que lo hizo fue Abraham. Sin embargo, también la circuncisión fue practicada mucho tiempo antes de la ley, pero, ¿es la circuncisión un principio que debe ser observado por los cristianos hoy en día? ¡No!. ¿Y qué diremos de la distinción de animales puros e impuros? Tal distinción ya existía en los días de Noé. También se puede decir lo mismo de los "sacrificios de animales", pero, ¿quién argumenta que vamos a abstenernos de ciertos alimentos, a guardar un día de la semana, a practicar la circuncisión y a sacrificar animales, porque todo esto se hacía antes de la ley? De hecho, lo que muestra el Nuevo Testamento es que los cristianos no practicaron la circuncisión, ni nada de todos aquellos rituales, estilos y formas de adoración patriarcal; y cuando lo hicieron, fueron sancionados por los apóstoles. De la misma manera no encontramos a ningún cristiano pagando su diezmo; por tanto, tal argumento no es consistente con la verdad.
Se dice que el diezmo es practicado en la era patriarcal, la era mosaica y la era cristiana, por tanto, es un principio. Esto no es cierto. Es verdad que en la era patriarcal y la mosaica se pagó el diezmo, pero en el Nuevo Testamento el diezmo no fue practicado sino superado. Así reconocen quienes están a favor del diezmo:
"..En todos los casos de ofrendas mencionadas en el Nuevo Testamento los cristianos dieron más del diezmo.."
( El Principio del diezmo, John G. Alber, Centro de Comunicaciones Culturales, A.C. pág. 13.)
"..El espíritu del Nuevo Testamento como se observa en la vida de los primeros discípulos y apóstoles, es de magnanimidad y liberalidad. Piensen en los individuos que al aceptar el evangelio dieron más allá del diezmo.."
( Manual de Finanzas para la Iglesia, F. W. Patterson, Casa Bautista de Publicaciones, pág. 35.)
Ahora, si lo que dicen estos escritores es cierto, entonces la afirmación de que, "..el diezmo fue practicado en la era patriarcal, mosaica y cristiana..", es falsa y contraria a la verdad.
No queda ninguna otra argumentación para afirmar que el diezmo es un principio. La verdad es que los que afirman que el diezmo es un principio, no lo pueden probar sólidamente, sino que lo aceptan como tal sin presentar ninguna evidencia al respecto.
EL DAR EN EL NUEVO TESTAMENTO
Como ya lo he mencionado anteriormente, en el Nuevo Testamento no dice que los cristianos practicaron el diezmo. Ahora, cuando algunos escuchan esta afirmación, además de no gustarles, ponen como objeción el hecho de que Cristo haya enseñado y aprobado el pago de los diezmos. ¿Cómo explicamos esto?
Cristo nació y vivió bajo la ley (Gálatas 4:4). Esto es lo primero que debemos recordar cuando hablamos de lo que Cristo enseñó en cuanto al diezmo. ¿Enseñó Cristo en contra de los sacrificios? ¿Enseñó en contra del incienso? ¿De la pascua? ¿De la circuncisión? No, Cristo no enseñó nada en contra de todo esto. Lo interesante es que no sólo no enseñó en contra de esto, sino que lo practicó, ¿no fue circuncidado? ¿No fue al templo a adorar y a ofrecer sacrificios? ¿No celebró la pascua? Etc. Esto lo entendemos porque nació y vivió bajo la ley, así que no es extraño que hablase a favor del diezmo.
En Lucas 18:12, Cristo menciona el diezmo, sin embargo, la enseñanza clara ahí es con respecto a quienes confían en sí mismos y menospreciaban a los demás. Pero no se muestra nada a favor del diezmo en la iglesia.
En Mateo 23:23, una vez más Cristo menciona el diezmo al acusar a los fariseos de hipócritas. Muchos dicen que aquí es donde se encuentra la base para seguir pagando diezmos como iglesia. Sin embargo, un análisis del texto muestra todo lo contrario. Le invito a que lo leamos y lo analicemos.
ANÁLISIS DE MATEO 23:23
"..¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello.."
Lo primero que llama mi atención, en este texto, es la frase: "..lo más importante de la ley..". Cristo dice que los fariseos sí cumplían parte de la ley, porque diezmaban "..la menta y el eneldo y el comino..", pero no guardaban "..lo más importante de la ley..". Esto claramente indica que el diezmo seguía siendo parte de la ley en los días de Cristo.
Teniendo en mente esto, podemos comprender por qué Cristo dijo: "..esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello.." ¿por qué? Porque Cristo, lo que está diciendo, es que no dejen de guardar la ley, toda la ley. Sí, los judíos estaban obligados a diezmar, pero también la justicia, la misericordia y la fe era necesaria para guardar la ley.
A continuación, le invito a que comprendamos esto por medio de una gráfica que nos presenta en un solo cuadro, todo el pensamiento central del texto en cuestión.
En un sólo concepto, lo que Cristo está enseñando es que no dejen de cumplir la ley, toda la ley y no sólo aquello que es externo (cf. Lucas 11:37-52). Si nosotros como cristianos tomamos este texto para justificar la colecta de diezmos, entonces estamos obligados a guardar toda la ley y no una parte de la ella. El plan de Cristo no era llegar y cambiar todas las cosas durante su ministerio, esto lo haría con su muerte. Pero en su ministerio enseñó y guardó la ley, incluyendo el diezmo.
Ahora, en el libro "El Principio del Diezmo", en la página 11, dice que "..uno no está obligado a diezmar.." Y parece que esta es la idea de todos aquellos hermanos que están a favor del diezmo. Dicen que este no es obligatorio sino voluntario. Sin embargo, su argumentación choca con lo que dice Cristo en este pasaje. Y esto es muy importante porque este es uno de los textos más utilizados por quienes están a favor de un diezmo voluntario. Notemos en qué consiste el problema.
Cuando Cristo dijo: "..Esto os era necesario hacer, sin dejar aquello.." (Lucas 11:42) Está enseñando que, tanto la justicia, la misericordia y la fe, así como el diezmo, son cosas obligatorias y no voluntarias. Las palabras "..era necesario..", son traducción del griego dho (deo), que significa "atar" o "ser obligatorio":
"..Esto es lo que deben hacer.."
(Dios habla hoy)
"..pero esto es lo que debíais haber practicado.."
(La Biblia de las Américas)
"..Debían haber practicado esto.."
(Nueva Versión Internacional)
¿Se puede decir, entonces, en el contexto histórico en el que Cristo está hablando, que la justicia, la fe, la misericordia y el diezmo sean cosas voluntarias? No. Cristo está hablando de cosas que eran obligatorias; y si esto es así, entonces el diezmo ya no es algo voluntario. Si tomamos este texto y lo aplicamos a la iglesia, hacemos que exista una contradicción, ya que, lo que escribió Pablo es todo un contraste con tales mandamientos; él dijo: "..como propuso en su corazón..". En el diezmo mencionado no se propone, se cumple y punto; mientras que en la ofrenda sugerida por los apóstoles no se debe, sino que se propone, es voluntario.
La verdad es que no hay contradicción entre lo que dice Pablo y lo que dice Cristo. Basta con poner a cada pasaje dentro de su contexto histórico correspondiente, y el problema se soluciona. Cristo está hablando a judíos sujetos aún a la ley, pero libres de ella hasta la muerte de Cristo. Pablo ya habla dentro del contexto del Nuevo Pacto, y en el Nuevo Pacto no se debe o se obliga a los creyentes a dar; toda su obra es netamente voluntaria. ¿Había judíos en la congregación que estaba en Corinto? Sin duda que sí, ¿se imagina usted la expresión de ellos a saber que, mientras estuvieron sujetos a la ley de Moisés, se les obligaba a pagar diezmos, pero ahora, se les pedía que dieran según su corazón, voluntariamente y con alegría?
ANÁLISIS CONTEXTUAL DE FILIPENSES 3:5
"..En cuando a la ley, fariseo.. en cuanto a la justicia que es en la ley, irreprensible.."
Existen hermanos que dicen que este texto es una evidencia indirecta de que Pablo sí practicaba el diezmo, ya que, si no fuera así, entonces el no hubiera podido decir lo que dice este pasaje.
Este texto no es válido para decir que Pablo practicaba el diezmo cuando este ya era cristiano. No cabe duda que, cuando aun no se convertía al cristianismo, él practicase todo aquello que era propio del sistema judío. Sin embargo, estas palabras no se pueden aplicar a Pablo como una conducta en la fe cristiana con respecto a leyes y tradiciones.
Si decimos que Pablo aun diezmaba por lo que dice este texto, entonces también estaríamos en lo correcto si dijéramos que, como cristiano, Pablo seguía persiguiendo a la iglesia: "..en cuanto a celo, perseguidor de la iglesia.." (v. 6) Sin embargo, es absurdo pensar que Pablo seguía persiguiendo a la iglesia después de su conversión. De la misma manera, como ya no perseguía a la iglesia, tampoco se puede decir que él seguía practicando ritos, leyes o tradiciones de la ley judía.
Si las palabras de Pablo hacen referencia a la práctica del diezmo, concluimos que diezmar es "..confiar en la carne.." (v. 4), que practicar el diezmo en la era cristiana sería como intentar guardar "..la ley.." (v. 5), y si esto fuera el caso, Pablo es uno de los hombres más inconsistentes del mundo, ya que, hasta el cansancio repite que no debemos intentar guardar la ley (ver la epístola a los Gálatas y el libro de Hebreos). La verdad es que este texto no tiene que ver con la práctica del diezmo en el Nuevo Testamento.
ANÁLISIS CONTEXTUAL DE 1 CORINTIOS 9:13
"..¿No sabéis que los que trabajan en las cosas sagradas, comen del templo, y que los que sirven al altar, del altar participan?.."
Con este texto se argumenta que Pablo sí enseñó el diezmo a las iglesias. La razón se debe a que, en cuanto al sostenimiento de los predicadores, Pablo hace referencia al sistema de la ley, y si él hizo esta referencia, se entiende que los predicadores deben vivir de los diezmos de la Iglesia, así como los levitas vivían del diezmo del pueblo judío.
Con una interpretación tan ligera del texto, sin considerar el contexto, pues, es válida la enseñanza; sin embargo, no es así cuando analizamos el texto dentro de su contexto.
Lo que Pablo discute aquí es el "..derecho.." de sostenimiento que tiene el predicador de Cristo. Esta palabra aparece seis veces en todo el capítulo, lo que indica que se están discutiendo los derechos que tiene un siervo de Dios. Pablo no está discutiendo la "cantidad" que debemos dar en la iglesia, sino el derecho que tiene un predicador para recibir un sostenimiento por su trabajo. Pablo, como en otras ocasiones, y a raíz de que no había Nuevo Testamento escrito, utiliza ejemplos de las Escrituras Hebreas para probar un punto, esto se nota cuando leemos el versículo 14: "..Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio.." Pablo no está diciendo que tenemos que diezmar para darlo a los predicadores, como los judíos lo daban a los levitas; no, Pablo está diciendo que "..Así.." como Dios estableció en el Antiguo Testamento que los levitas participaran del altar, de la misma manera los predicadores deben "..vivir.." del evangelio. No, Pablo no dice que los predicadores deben vivir del "diezmo" de la iglesia, sino "del evangelio".
La fuerza del argumento no está en la cantidad que se debe dar para sostener a los predicadores, sino en que se debe "sostener" a quienes anuncian el evangelio. Pablo no está discutiendo la cantidad que la iglesia debe dar, o si estaban dando o no; la iglesia ya estaba dando, el punto era que se debía "sostener" a quien servía en la predicación del evangelio.
Es más, el verso 12 indica que los corintios ya estaban sosteniendo a algunos predicadores, pero el problema es que no querían reconocer al apostolado de Pablo y sus derechos como tal. Pero Pablo no está diciendo cuanto tenemos que dar, sino que debemos sostener a los predicadores del evangelio.
En el verso 14, Pablo inicia utilizando un símil, mostrando con esto que la comparación con el sistema judío en cuanto a los levitas, no era la cantidad que recibían para vivir, sino que recibían para vivir. Pablo no usa el símil para una comparación entre cantidades, sino en privilegios.
Pablo no está diciendo: "..así como los levitas vivían del diezmo, así deben vivir del diezmo los que anuncian el evangelio.." No, sino que está diciendo: "..Así como los levitas eran sostenidos, así ordenó el Señor que también los predicadores sean sostenidos.."
Si Pablo tuviera en mente el diezmo, ¿por qué no mencionarlo? Es muy sencillo saber por qué no lo mencionó:
Porque no lo tenía en mente.
Porque el Espíritu Santo no lo inspiró.
Porque no es el tema del capítulo.
Porque no concuerda con el asunto que se discute en el capítulo.
Porque la iglesia no diezmaba, sino que ofrendaba.
Porque ya había enseñado que en la iglesia se recogen ofrendas.
Estas son algunas de las razones por las que Pablo no menciona el diezmo en el texto, existen muchos otras razones, pero creo que si usted es sincero, notará que el texto no está hablando del pago de diezmos.
ANÁLISIS CONTEXTUAL Y GRAMATICAL DE HEBREOS 7:8
Este texto a servido como base para decir que los diezmos son parte de las ofrendas en la iglesia. Sin embargo, a pesar de que no hay ningún ejemplo en todo el Nuevo Testamento donde se muestre a los cristianos practicando el diezmo, aún así muchos se basan en este pasaje para justificar su enseñanza.
¿Cuál es la argumentación? Se dice que Abraham dio diezmos a Melquisedec. Si Melquisedec representa a Cristo, entonces nosotros debemos dar diezmos a Cristo, porque somos hijos de Abraham.
¿Enseña eso el texto? No. Basta con leerlo con detenimiento y notará que el texto no trae esa enseñanza. ¿Qué enseña el texto? Bueno, antes de presentar el análisis del pasaje, mostraré lo que opinan Leland Wilson, quien pertenece a un grupo religioso que practica el diezmo; sin embargo él reconoce:
"..El énfasis aquí no recae en el diezmo sino en el sacerdocio de Cristo.." (Diccionario de la Teología Práctica/mayordomía, Leland Wilson, publicado por la Subcomisión Literatura Cristiana de la Iglesia Cristiana Reformada, distribuido por T.E.L.L., pág. 52.)
Podríamos estar horas enteras discutiendo cuál es el tema de este capítulo; sin embargo, alguien que no reconoce que el diezmo se menciona aquí de manera incidental con el fin de probar un punto, no está tomando en cuenta importantes principios de interpretación bíblica.
¿Cuál es la discusión del escritor de Hebreos? Si leemos el contexto nos daremos cuenta de esto. En el capítulo 8, versículo 1, se nos explica el tema de la discusión que se está teniendo. Para evitar que los lectores de la epístola pierdan el asunto de todo lo que ha estado probando, en este capítulo presenta, a manera de resumen, todo lo que ha tratado en los capítulos 4-7.
"..Unos seis capítulos (4:10-10:18) se dedican a la discusión del sacerdocio, a fin de demostrar la superioridad del sacerdocio de Cristo al de Aarón.." ( La Epístola a los Hebreos, A. B. Rudd, ed. Clie, pág. 81.)
¿Qué es lo que ha probado el escritor de Hebreos, según el capítulo 8, versículo 1? He aquí un resumen de lo que ha discutido el escritor:
Que Cristo es superior a todos los demás sacerdotes que jamás hayan existido.
Que el sacrificio ofrecido por el pecado era suficiente y eficaz y como tal, aceptado por Dios.
Que él tiene todo poder en los cielos y que es patente para salvar y defender hasta lo último a los que por él se allegan a Dios.
Que él no se ausentaba del lugar santísimo después de haber ofrecido el sacrificio como lo hacían los sumos sacerdotes judíos, sino que permanece allí, ante el trono de Dios como sumo sacerdote.
Como vemos, el escritor de Hebreos no está tratando con el asunto acerca de la cantidad que debemos dar en las ofrendas. Todo el capítulo trata de la superioridad del sacerdocio de Cristo sobre el sacerdocio levítico, pero no es un tratado de mayordomía.
También hay quienes dicen que en las palabras: "..y aquí ciertamente reciben los diezmos hombres mortales.." (v. 8), se está haciendo referencia a los ministros. ¿Cuál es la base para decir esto? Ninguna.
No existe ninguna razón exegética para afirmar tal cosa, pero si existe suficiente razón para decir que tales palabras hacen referencia a los levitas y no a los ministros del evangelio. ¿Cuál es esta razón? El contexto histórico del pasaje. Debemos recordar que cuando se escribió la epístola a los hebreos, el templo judío aún estaba en función, y obviamente, los levitas seguían cobrando y viviendo de los diezmos del pueblo. Si el pasaje hiciera referencia a los predicadores de la iglesia, ¿qué tienen que ver dentro de la discusión? ¿Acaso no se vería afectada la argumentación del pasaje? ¿Acaso no se altera la armonía sostenida desde los versos anteriores? La verdad es que los predicadores de la iglesia "no tienen vela en este entierro", y no hay razón para que estén siendo mencionados en esta discusión. Sería como estar discutiendo la composición y la sustancia de las manzanas, y de pronto meter un frijol en el tema. ¡Cuidado con su exégesis! Cuidado con su sistema de interpretación. Lo que yo veo es que muchos sólo están repitiendo lo que alguien les dijo, y sin analizarlo, se lo creyeron.
Otros dicen que Pablo está aprobando el diezmo en la iglesia, al decir que Cristo recibe los diezmos en el cielo. ¿De dónde sacaron esa idea? De las palabras: "..pero allí, uno de quien se da testimonio de que vive.." (v. 8). Dicen que en la tierra reciben los diezmos hombres mortales, pero que en el cielo los recibe Cristo.
Otra vez, no hay prueba que sostenga tal interpretación. El "..aquí.." de la primera cláusula de este versículo se refiere a las instituciones mosaicas que estaban entonces, mientras que el "..allí..", es decir, "en este lugar", al ser un contraste entre Abraham y Melquisedec, alude al pasaje de Génesis 14:20, donde se relata que Abraham dio los diezmos a Melquisedec, a quien todavía se consideraba vivo, sin sucesor; porque no hay referencia a su muerte, ni a la terminación de su sacerdocio.
"..De Melquisedec "se da testimonio de que vive" en el sentido de que nunca leemos de él de otro modo que no sea como un hombre vivo.." (La Epístola a los Hebreos, F. F. Bruce, Nueva Creación, pág. 144.)
Entonces el "allí " no hace referencia al cielo, sino al momento en que Abraham da los diezmos a Melquisedec. A continuación le presentó más evidencia de que el texto no hace referencia a Cristo, recibiendo diezmos en el cielo.
Quiero aclarar solamente que la evidencia que presento a continuación, no pertenece a algún predicador de la iglesia del Señor, esta información es obtenida de una fuente denominacional. Esto es importante aclararlo, ya que, a veces, y desafortunadamente, la gente le hace más caso a las enseñanzas denominacionales que a la palabra de Dios, o a los estudios de predicadores fieles a Cristo.
Una vez aclarado este punto, analicemos el comentario que sigue, ya que, nos proporciona información muy interesante con relación al texto que estamos estudiando. Que curioso que mejor los maestros denominaciones interpreten mejor un texto bíblico, que algunos hermanos, que por defender un punto doctrinal equivocado, tuercen el texto e interpretan el pasaje como si fueran nuevos en el estudio de la Biblia.
LA FIGURA DE DICCIÓN EN
HEBREOS 7:8
El texto se refiere claramente a Melquisedec, pero no se da testimonio en la Biblia de que Melquisedec viva todavía, en cambio, de Cristo se dice en Salmo 110:4, "..tu eres sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec..". Lo que distinguió "el orden de Melquisedec" del "orden de Aarón" fue que el Sacerdocio del orden de Aarón comenzaba a ejerciere a los 30 años y tenían que jubilarse a los 50, mientras que los días del sacerdocio de Melquisedec no tenían "principio ni fin"; es decir, toda su vida fue sacerdote (v. 3). Esto mismo es lo que significa la frase griega "eis to dienekés" = a perpetuidad; es decir, sin solución de continuidad. Lo mismo significa en 10:1 ("continuamente", hasta el fin de la dispensación mosaica); 10:12 ("..habiendo ofrecido a perpetuidad.." o: "se sentó a perpetuidad"); 10:14 ("para siempre", indicando que la acción perfecta del fruto de este sacrificio continúa durante toda la vida de los que van siendo santificados (lit.). Por consiguiente, la elipsis del presente versículo ha de suplirse del modo siguiente: "..Y aquí ciertamente reciben los diezmos hombres mortales; pero allí recibe los diezmos uno de quien se da testimonio de que vive como sacerdote toda su vida..". En el N. T. Tenemos muchos ejemplos de esta figura, llamada enálege = cambio, por la que, para dar mayor viveza a la narración, se usa el tiempo presente ("presente histórico") en lugar del pretérito. Lo que, pues, significa este versículo es que, así como Melquisedec fue sacerdote toda su vida (aun cuando él era mortal), así también Cristo, según el mismo orden, es sacerdote toda su vida, la cual es eterna; por tanto, es sacerdote para siempre (v. 24) (Diccionario de figuras de Dicción usadas en la Biblia. E. Bullinger-F. Lacueva, 1985, Editorial Clie, pág. 103.)
¿Dónde pues queda el diezmo dentro de todo la discusión del escritor de la epístola? ¿Como una referencia al diezmo que daban los cristianos? No, sino sólo como un argumento escritural que el escritor de la epístola utiliza, no para exhortar o enseñar a la iglesia a diezmar, sino para demostrar la superioridad del sacerdocio de Cristo sobre el sacerdocio levítico; y por cierto, la superioridad del Nuevo Pacto sobre el Antiguo. ¿No será por esto que las iglesias no diezmaban sino que daban más (superioridad) que lo que daban los judíos? Píenselo...
NOTA DE INTERÉS
DEL ORIGEN DEL DIEZMO EN LAS IGLESIAS...
La Iglesia primitiva no recurrió al sistema del diezmo por varios siglos, aún cuando el sostén del clero fue reconocido como correcto desde un principio y se daban también limosnas para los pobres. La orientación propia al cristianismo respecto a las ofrendas es expresada por Irineo, quien describe a los cristianos como "..aquellos que, habiendo recibido libertad, dedican todas sus posesiones al cumplimiento de los propósitos del Señor, ofrendando libremente y con alegría parte de su propiedad, y no la de menor valor.." (Contra las Herejías IV, p. 18). Allá por la época de Carlomagno, empero, se fue estableciendo el aporte del diezmo como práctica habitual para el sostén del obispo y del clero, para la ayuda de los pobres y para el mantenimiento de las propiedades eclesiásticas. SE JUSTIFICÓ ESTE PROCEDER COMPARANDO A LOS SACERDOTES CRISTIANOS CON LOS LEVITAS, aún cuando dicha comparación carece de legitimidad exegética puesto que los sacerdotes de la Iglesia eran presbíteros y obispos mientras que los hijos de Leví eran hieráticos. Lo que es peor, durante la gran parte del medievo hubo enormes abusos prácticos en los que el diezmo llegó a ser usado como soborno para la compra de puestos eclesiásticos.."(Diccionario de la Teología Práctica/Mayordomía. Editor general: Rodolfo G. Turnbull. Publicado por la Subcomisión Literatura Cristiana de la Iglesia Reformada - Énfasis agregado)
Este fragmento es muy interesante. En primer lugar, representa una evidencia histórica que nos dice que, "la iglesia primitiva no recurrió al sistema del diezmo", sino que tal práctica se dio varios "siglos" después. ¡Los sectarios saben y reconocen que en la iglesia del Señor no se practicaba el diezmo! Pero muchos hermanos, persistiendo en el error, siguen diciendo que tal practica es más que una necesidad, sino hasta una obligación, un principio. También llama mi atención que, así como los romanistas argumentaron para justificar la colecta de diezmos, también usan tales argumentos los hermanos pro diezmos en la actualidad.
Ahora, es verdad que el Antiguo Testamento dice que el diezmo era para los levitas: "..Y habló Jehová a Moisés, diciendo: Así hablarás a los levitas, y les dirás: Cuando toméis de los hijos de Israel los diezmos que os he dado de ellos por vuestra heredad.." (Nm. 18:25, 26; He. 7:5). Sin embargo, ¿aceptarán esos predicadores pro diezmos, y que viven de ellos, que los huérfanos, las viudas y los extranjeros también reciban una parte de los diezmos de la iglesia? (Dt. 14:28) ¿lo comparten con los porteros y los cantores? (Nm. 13:5), y si lo hacen, ¿con qué portero y con cuáles cantores? Pero la verdad es que tal distinción no es válida en el Nuevo Testamento, ya que, según el Nuevo Pacto, ¡todos los creyentes somos sacerdotes! (1 P. 2:5, 9). El antiguo sacerdocio no tiene vigencia ahora, ya que, si hay nuevo pacto, luego, ha sido "cambiado el sacerdocio" (He. 7:12). Así que, tal argumentación de comparar a los predicadores con el sacerdocio de los levitas, es erróneo y no tiene base en la verdad.
¿POR QUÉ NO SE MENCIONA EL DIEZMO EN EL NUEVO TESTAMENTO COMO ALGO QUE LAS IGLESIAS PRACTICARON?
Esta es otra de las preguntas claves que muchos no pueden contestar. Y la razón por la que no pueden hacerlo, es que tal practica no es mencionada en el Nuevo Testamento como algo que los cristianos hayan guardado. Para alguien que conoce la verdad sobre el asunto, sabe que la razón de que se mencionan los diezmos como una práctica de la iglesia, se debe a que estos eran entregados, por ley, a los levitas; no obstante, y en vista de que tal sacerdocio no está vigente en el reino de Dios, es decir, la iglesia, ¡no hay a quien llevar diezmos, según la palabra de Dios!
Sin embargo, alguien a sugerido que la razón está en que la iglesia, al ser iniciada por judíos, no tuvo la necesidad de ser enseñada acerca del diezmo, porque ellos ya lo practicaban. Esta afirmación suena algo lógica, pero no es mas una proposición sin prueba. Sí, suena muy lógica, pero hay muchos detalles que no se toman en cuanta cuando es presentada con el fin de justificar el diezmo en la iglesia. El escritor que hemos citado anteriormente, dice que la practica de colectar diezmos de los creyentes, se justificó, comparando a los obispos con los levitas del Antiguo Testamento. Desde luego, hasta este mismo escritor sectario sabe y reconoce que tal comparación no tiene base escritural. Los hermanos pro diezmos alegan que los predicadores son como los levitas, y que deben vivir, como ellos, de los diezmos del pueblo de Dios.
¿Pensarían ustedes que un judío, acostumbrado a cumplir la ley, no tenía necesidad de recibir enseñanza acerca del dar bajo el Nuevo Pacto? ¿Sería muy normal para un judío, que por pura motivación personal, y conociendo lo que dice Malaquías 3:10, dejara de llevar el diezmo al templo judío para traerlo a cualquier otro lugar? ¿No es esto una indicación de que sí necesitaban que se les instruyera acerca de este asunto? ¿Sobre la base de que evidencia bíblica se deduce que los judíos siguieron diezmando al ser parte de la iglesia? ¿En cual? No la hay; y no tienen otra cosa que hacer mas que deducir esto, pero es una deducción que nace del propio punto de vista de quien la formula, y no de una base sólida en la Palabra de Dios.
No obstante, la Biblia sí nos da muestras claras de que los apóstoles sí enseñaron a los primeros creyentes (judíos) a dar, no el diezmo, sino más que el diezmo. Vamos a notar esto claramente descrito en la Palabra de Dios.
Comencemos con los primeros días de la iglesia. En Hechos 2:41 vemos que la iglesia inició como con tres mil personas; sin embargo, los apóstoles no eran como muchos ministros de hoy en día, que bautizan personas y luego las dejan a la deriva sin ser discipuladas. No, ellos, inmediatamente los instruyeron:
"..Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles.."
(Hechos 2:42a)
¿En qué perseveraba la iglesia? "..en la doctrina de los apóstoles.." Esto claramente indica que los apóstoles instruyeron a quienes pertenecían, ahora, al cuerpo de Cristo. Note, entonces, la conducta de la iglesia en los versículos 44 al 47, de este mismo capítulo. ¿Qué fue lo que motivó esta nueva conducta entre los judíos? ¿Acaso pensaremos que la misma es accidental? Y si es así, ¿no sería ilógico? Es claro que esta conducta, tan desconocida entre los judíos, tenía que nacer de la enseñanza que ellos habían recibido. ¡Esto es así! El verso 42 dice que fueron instruidos, y este es el efecto de esa enseñanza. Pensemos por un momento, ¿les instruyeron los apóstoles a dar? Sí, de otra manera no nos explicamos lo que la iglesia hará, de ahora en adelante, con este asunto.
Además, cuando leemos tales textos, notamos que, ¡ellos no diezmaron de lo vendido! Ellos dieron más que un diezmo, ellos dieron "todo", y lo hicieron de corazón, voluntariamente. Aquí cabe mencionar que la iglesia no organizó una venta de ropa para recaudar fondos, sino que cada individuo, por cuenta propia, llevó a cabo tal clase de ventas, entregando de lo vendido para las necesidades de sus hermanos pobres. Tampoco vemos que ellos estaban siendo obligados a dar, no había una maldición que los motivara, ellos dieron por amor, dieron por amor a Cristo, manifestaron su amor con hechos, su ofrenda vino del corazón; y ésta sería la practica cristiana de ahora en adelante.
¿Recibieron instrucción acerca del dar los primeros cristianos? Sí. Y si analizamos la conducta de la iglesia, comenzando desde esta escritura, vamos a notar la misma conducta. No, la iglesia no practicaba el diezmo, la iglesia daba más allá del diezmo, esto es lo que muestra la Biblia, no son deducciones u opiniones, es lo que la Biblia muestra y nada más.
¿Qué es lo que enseñaron los apóstoles a la iglesia primitiva con respecto a este asunto? Necesitamos saberlo para que también nosotros "..perseveremos en la doctrina de los apóstoles..", así como la iglesia primitiva lo hacía (Hechos 2:42a).
LA OFRENDA ES ADORACIÓN
(Filipenses 4:18, 19)
Es notable cómo en este pasaje se habla de la ofrenda como "..olor fragante, sacrificio acepto, agradable a Dios..". Esto nos habla de la importancia de la ofrenda dentro de nuestra adoración a Dios. Bien podemos decir que una iglesia que un cristiano que no "ofrenda" es uno que no esta "adorando" a Dios.
La ofrenda como "..olor fragante..", es comparada al "incienso" que ofrecían los judíos en el Antiguo Testamento. Como vemos, no sólo la oración es comparada al "incienso", sino también, como lo indica el pasaje, la acción de "ofrendar" de nuestros bienes representa un "..olor fragante.." para Dios.
¿Cree usted que la oración es importante? Pues también lo es la "ofrenda". Ninguna de estas dos formas de adoración son diferentes en importancia; pero curiosamente son las dos cosas donde muchas congregaciones de nuestros días fallan. ¿No es verdad que la oración es algo que no se practica mucho? Pues la "ofrenda" no se queda atrás. Hermanos, esto no debe ser así, debemos ser fieles en la oración y perseverar en ella (Hechos 2:42), pero también debemos ser fieles en nuestra "ofrenda".
Muchas personas en nuestros tiempos tratan de hacer sacrificios a Dios, tales como, caminar de rodillas, dejar de comer, cortarse el cabello, etc. Pero la Biblia nos dice que una vida santa es un "..sacrificio vivo.." y este, "..agradable a Dios.." (Rom. 12:1). Lo interesante de esto, es que no sólo una vida santa es lo que agrada a Dios, sino también la "ofrenda", ya que esta representa un sacrificio que agrada a nuestro Dios. Pablo dice que "ofrendar" es un "..sacrificio acepto..", es decir, que Dios "acepta" la "ofrenda"; es como un "sacrificio" que ofrecemos; el cual, es "..agradable.." a Dios.
¿Quiere usted adorar a Dios? ¿Quiere usted agradar a Dios? Una de las formas en que podemos hacerlo es en la "ofrenda". No podemos decir que adoramos a Dios si no estamos "ofrendando", tampoco podemos decir que agradamos a Dios si no estamos "ofrendando". Si queremos ser fieles a su voluntad, además de una vida santa, debemos "ofrendar" de nuestros bienes a Dios..
PRINCIPIOS BÍBLICOS ACERCA DE LA "OFRENDA"
En cuanto al "dar", el Nuevo Testamento siempre enseña "máximos" y no "mínimos". Esto lo podemos ver claramente en 2 Corintios, capítulos 8 y 9. Si estudiamos exhaustivamente estos capítulos se mostrará la verdad que he mencionado.
Dieron en "..tribulación.." (v. 2).
Dieron con "..gozo.." (v. 2).
Dieron con "..generosidad.." (v. 2).
Dieron "..más allá de sus fuerzas.." (v.3).
¿Daremos menos nosotros? Pablo está poniendo de ejemplo a "..las iglesias de Macedonia.." para que también la iglesia en Corinto abundara en esa "..gracia.." (v. 1, 7). Esto también debe ser un ejemplo para nosotros.
Recordemos que esta "ofrenda" se estaba levantando a causa de la necesidad por la que estaba atravesando la iglesia en Jerusalén. ¿No tiene necesidades la iglesia en nuestros días? Sigamos el ejemplo bíblico; "ofrendemos" con "generosidad", como los de "Macedonia", para que así, las necesidades sean suplidas.
Cuando nosotros "ofrendamos", estamos "sirviendo" a nuestros hermanos y al Señor, ya que por medio de la "ofrenda", el Reino del Señor sigue avanzando y sigue siendo de bendición para todos nuestros hermanos (v. 4).
Cuando "ofrendamos" estamos mostrando el amor que tenemos para con Dios (v. 8, 9). Es más, Pablo dice que es una "..prueba.." de la "..sinceridad del amor.." que nosotros tenemos hacia Dios.
Otra vez, nadie puede decir que ama a Dios si no está "ofrendando"; ellos simplemente no pasan esta "prueba" cuando no "ofrendan" para las necesidades del Reino.
Los primeros cristianos, según nos muestra el libro de los Hechos, estaban ya practicando esto que está diciendo Pablo, y a tal grado, que "..los que poseían heredades o casas, las vendían.. y se repartía a cada uno según su necesidad.." Note como las palabras "heredad" y "casa" están en plural, indicando que no todos vendieron sus casas; sólo los que tenían varias "casas". (4:32-35); así pues, vemos que la "ofrenda" es una manera de proveer para la igualdad (2 Cor. 8:13-15).
También nos enseña 2 Corintios, que la "ofrenda" puede ser propuesta de antemano si es para el mejor interés de la obra (9:1-5).
LA "OFRENDA" SEGÚN EL NUEVO TESTAMENTO
El Nuevo Testamento enseña que ofrendemos "..cada primer día de la semana.." (1 Corintios 16:1, 2). Es notable que muchos predicadores pro diezmos, no solamente no se conforman con pedir el diezmos a los hermanos, sino que también les piden ofrendas "entre semana". ¿Bíblica su práctica?
El Nuevo Testamento nos enseña que "..cada uno.." debe ofrendar (1 Corintios 16:1, 2). Cada uno hace referencia a los que tienen entradas de dinero. Muchos jóvenes que tienen un trabajo, y por ende, entradas económicas, no ofrendan, pensando que es su padre el responsable, pero ellos no. ¿Es bíblica su idea?
El Nuevo Testamento nos enseña que debemos ofrendar "..generosamente.." (2 Corintios 8:1-4; 9:6). Muchos predicadores suelen enseñar mal a la iglesia, alegando que si usted quiere dar un peso, o cincuenta centavos, esta bien, sólo que lo haga de corazón. No obstante, y aunque es verdad que debemos ofrendar de corazón, esto no quiere decir que la ofrenda es lo que nos sobra, o que la generosidad a la que se refiere Pablo, no implica mucho dinero. Note que la ofrenda de la viuda, en comparación de lo que muchos ofrendaban, era poquito, pero, como era todo lo que tenía, era mucho en comparación de aquellas grandes cantidades de dinero que sobraban a los ricos. Nuestra ofrenda debe ser generosa. La mezquindad no tiene cabida en el corazón del cristiano fiel. No obstante, muchos se preguntan, ¿cuánto ofrendo, entonces, para ser generoso? Bueno, ahí está el ejemplo bíblico (2 Corintios 8:1ss) Véase el artículo: ¿Cuánto ofrendo para ser generoso?
El Nuevo Testamento enseña que debemos ofrendar "..con alegría.." (2 Corintios 9:7). Muchos de los judíos no daban sus diezmos a Dios con alegría; sin embargo, la ley era la ley. ¿Qué nos motiva a dar con alegría? El amor de Dios, ya que, "Dios ama al dador alegre" (2 Cor. 9:7)
El Nuevo Testamento enseña que debemos ofrendar de buena voluntad (2 Corintios 8:12). El ejemplo de los hermanos de Macedonia muestra que, según el orden de las cosas, es necesario que "primero" exista la voluntad en nosotros, ya así, nuestra ofrenda, no solamente será generosa, sino también aceptada por Dios (2 Cor. 8:12)
NO DESCUIDEMOS EL PRINCIPIO BÍBLICO
Nosotros no debemos descuidar este principio bíblico de "dar". En la Era Patriarcal "dieron", en la Era Mosaica "dieron" y en la Era Cristiana "damos".
Es cierto que la especie, la cantidad y la regularidad han cambiado, pero el principio del "dar" permanece. Notemos esto claramente en la Biblia:
"..Por la fe Abel ofreció a Dios un mejor sacrificio.."
(Hebreos 11:4).
Como vemos, aquí claramente el "dar" está implicado en la palabra "ofreció".
"..Diezmarás fielmente todo el producto de tu sementera.."
(Deut. 14:22).
En este pasaje, el principio del "dar" también es implícito en la palabra "diezmarás".
"..Cada uno dé como propuso en su corazón.."
(2 Corintios 9:7).
En estos tres textos bíblicos que hemos considerado anteriormente, cada una de las diferentes eras en la historia bíblica, nos muestra que el principio del "Dar" no cambia.
Como hemos visto, el Señor no ha dejado a su iglesia sin un plan de mayordomía. Los Patriarcas tuvieron el suyo, los que vivieron en la era Mosaica el suyo, y la iglesia el suyo.
Así que, hermanos, este plan de ofrendar no es un plan de hombres, es el plan de Dios; quizás es un plan en el que se espera más del cristiano que del judío, pero quizás esto se deba a que nuestra misión como iglesia es muchos más amplia y gloriosa.
¿SOMOS BENDECIDOS AL OFRENDAR?
En toda la Biblia podemos ver que Dios siempre bendice al obediente. Es más, con el simple hecho de tener fe en él, ya somos bendecidos (Hebreos 11:6).
En cuanto a nuestra fidelidad en la "ofrenda", también recibimos grandes y preciosas bendiciones.
El Nuevo Testamento enseña que "..Dios ama al dador alegre.." (2 Corintios 9:7).
¿Qué puede haber más valioso que el amor de Dios? Cuando nosotros ofrendamos con alegría y generosidad, Dios nos "ama".
El Nuevo Testamento enseña, que cuando ofrendamos, Dios nos bendice en "todas las cosas" (2 Corintios 9:8).
El Nuevo Testamento enseña, que cuando ofrendamos, abunda fruto en nuestra cuenta (Filipenses 4:17, 19).
Desde luego, tales palabras no deben motivarnos a practicar y predicar un "evangelio de la prosperidad", como muchos falsos maestros lo están haciendo en nuestros días. Estas bendiciones son dadas por Dios, pero no somos motivados a obtenerlas a "cambio de" nuestra ofrenda. Ellas son sencillamente un efecto amoroso de parte de Dios, no como un resultado de inversión, sino como un resultado de nuestra obediencia. Muchas congregaciones cantan: "Si yo doy un peso, el Señor me da dos", ¡eso no enseña la Biblia! Esa clase de cantos fueron la semilla que produjo el movimiento sectario del "evangelio de la prosperidad". Y desde luego que la lógica es correcta, ya que, "si yo doy cien pesos, ¡el Señor me da doscientos más!" ¡Todo es un tremendo negocio!. Pero ese "evangelio según San Judas Iscariote" no es lo que la Biblia enseña en cuanto a las ofrendas. Somos bendecidos en "todas las cosas", pero no ¡con todas las cosas!. Somos bendecidos en "lo necesario", pero esto no implica que vamos ser millonarios.
También debemos de recordar que lo que nos motiva a dar, es la bendición de la salvación que Dios nos ha dado. Por tanto, aún antes de que nosotros diéramos al Señor, él ya nos había bendecido.
ERRORES QUE DEBEMOS EVITAR
Son muchos los hermanos que enseñan que la ofrenda puede ser usada para ayudar a los que nos son cristianos. Esto ha resultado en el establecimiento de diversas instituciones de benevolencia, para ayudar a los necesitados, y desde luego, tales instituciones son sostenidas con las ofrendas de la iglesia. Muchos justifican tales instituciones como un método de evangelismo, argumentando que dan estudio y alimento a jóvenes y niños, pero también se les comparte del evangelio, teniendo así lo que muchos llaman, "iglesia cautiva".
Antes de analizar este punto que tiene que ver con el uso de la ofrenda de la iglesia, es necesario aclarar que no se está diciendo que tales instituciones de benevolencia, enseñanza o evangelismo, sean malas en sí mismas. Es muy bueno ayudar a los huérfanos, a los necesitados, a los ancianos y a mujeres desamparadas. Es muy bueno preparar jóvenes para que sean predicadores. Es muy buena y útil la literatura de las editoriales y casas de publicación que muchos hermanos tienen; sin embargo, aquí el punto no tiene que ver con la función de tales instituciones, sino cómo se sostienen. ¿Es bíblico que la ofrenda de la iglesia sea destinada a tales instituciones? Ese es el punto a tratar. Tampoco debemos caer en la engañosa frase de, "el fin justifica los medios", ya que, con esta frase se han cometido toda clase de errores e injusticias en el mundo, y también en la iglesia.
Monday, July 7, 2008
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